Salmos 121:1 al 8
dice: 121:1 Alzaré mis ojos a los montes;
¿De dónde vendrá mi
socorro?
Mi socorro viene de
Jehová,
Que hizo los cielos y
la tierra.
No dará tu pie al
resbaladero,
Ni se dormirá el que
te guarda.
He aquí, no se
adormecerá ni dormirá
El que guarda a
Israel.
Jehová es tu
guardador;
Jehová es tu sombra a
tu mano derecha.
El sol no te fatigará
de día,
Ni la luna de noche.
Jehová te guardará de
todo mal;
El guardará tu alma.
Jehová guardará tu
salida y tu entrada
Desde ahora y para
siempre.
Hay una cosa que te
rehúsas a entender y es que Dios te está extendiendo su mano, por alguna razón
o por simple orgullo quieres ignorar que necesitas su ayuda.
Has tratado por todos
los medios de hacer las cosas a tu manera, sin embargo nada ha sido suficiente,
mientras tanto Dios sigue con su mano extendida esperando el momento en el que
por fin reconozcas que necesitas su ayuda, pues en esa situación solo Dios es
capaz de dar una verdadera solución.
¿No te sientes cansado
de luchar con eso que parece que te vence?, ¿No te has cansado de intentar en
tus propias fueras salir adelante y fallar en el intento?, Entonces, ¿Por qué
no aceptas la ayuda de Dios?, ¿Qué es lo que evita que aceptes su mano
extendida sobre ti?
Dios como Padre
amoroso esta allí viéndote como lo intentas en tus propias capacidades, viendo
cómo te rehúsas a mirar al cielo y observar su mano extendida, ¿Qué quieres
demostrar?, ¿Qué puedes solo?, ¿Desde cuándo puedes solo?, ¿Se te ha olvidado
que todas las veces que has salido adelante de situaciones similares es porque
Dios ha actuado de formas sobrenaturales haciendo lo imposible, posible?, ¿Por
qué en esta ocasión no vas al único que en verdad te puede dar una solución?
A veces en la vida
vamos a intentar orgullosamente salir adelante con todo lo que tenemos, pero en
ocasiones ni todo lo que tenemos, ni todas nuestras fuerzas o capacidad serán
suficientes para salir adelante y es allí en donde queriendo o no tenemos que
alzar nuestros ojos al cielo para darnos cuenta que Dios siempre estuvo con sus
manos extendidas queriendo ayudar en aquello en lo que pensábamos no
necesitarlo.
Hoy quiero invitarte a
reconocer que necesitas la ayuda de Dios, que solo no puedes, que solo con su
ayuda puedes salir adelante de todo eso que en este momento te atormenta, no
puedes seguir siendo un orgulloso que no quiere reconocer su gran necesidad de
Dios, es necesario que por una vez en tu vida saques de donde no tienes un poco
de humildad para reconocer que necesitas la ayuda de Dios.
Cuando por fin
reconozcas que realmente necesitas de Él y vuelvas a ver al cielo, observaras
como su mano Poderosa siempre estuvo allí esperando que aceptaras su ayuda.
Es momento de
reconocer la necesidad profunda que hay de Dios en nuestra vida, es momento de
sacar la poca humildad que muchas veces nos queda para dejar de ser orgullosos
y optar por la ayuda que Dios siempre quiere darnos.
¡Ríndete al Señor
hoy!, No te creas sabio en tu propia opinión o no te creas independiente de Él,
pues fuiste diseñado de tal forma que existiera en ti una dependencia hacia Él,
por lo tanto no niegues tu naturaleza espiritual y no obvies el diseño con el
que fuiste creado.
¡SU AYUDA ESTÁ
ENFRENTE DE TI!, ¡SOLO RÍNDETE A ÉL!
Autor: Enrique
Monterroza
Obtenido de: http://destellodesugloria.org/blog/?paged=3
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dejanos tu comentario con respecto al articulo escrito..Si lo quieres hacer de manera privada enviá un correo a comunidadcristianacharata@gmail.com.